VERGUENZA PROPIA Y AJENA

AMIGOS DE LA VIDA SOCIAL, DEPORTIVA Y POLITICA

Futbolísticamente, soy simpatizante del Club River Plate. Entonces, con toda facilidad pueden imaginar que en forma superlativa, se (dentro de la vergüenza propia), de; agobios, desánimos, abatimientos, tal vez todos estos estados hasta muy cerca de la humillación. De todos modos, son, solo quebrantos de una afición.

Ser argentino en la coyuntura y no por mera afición, (cargando la vergüenza ajena), en mi opinión; es más que agobiante, más que desánimo, más que abatimiento, llegando todos estos estados “si” a la humillación. Particularmente me siento humillado por  la subestimación emotiva e intelectual que como ciudadano recibo permanentemente desde el gobierno nacional de turno. El desenfado con que se enuncian medidas de estado con falaces y descreídas proclamas, es decididamente un oprobio. Las políticas de estado son mirando al futuro sin dejar de tener en cuenta el presente con toda la impronta del pasado. Lo nacional y popular es otra moral, la discusión se debe dar contra esa humillación ignominiosa que pretende institucionalizar, con el doble discurso el “kirchnerismo” y sus funcionales, para lograr de esta forma, “la meta”, sistemática de la enajenación y/o apropiación de la riqueza nacional.

Antes de continuar con lo que en este momento me anima, en otro aparte, expresare una reflexión personal en cuanto al gobernador de turno en Santiago del Estero.

Juan Luis Coria – Sgo. del Estero, abril 19 de 2012